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En el mes de diciembre, reinan el amor, la esperanza, la reflexión, la unión, las celebraciones y los deseos de prosperidad. Pero, todo esto viene acompañado con oraciones al cielo, para pedir y también agradecer. A ese instante en el que todos oramos en familia en temporada decembrina se le conoce como Novena de Navidad o Novena de Aguinaldos.

Esta tradición cristiana se extendió a países como Colombia, Venezuela y Ecuador y se realiza en la vigilia navideña. Justo en el mes del nacimiento del niño Jesús, las personas creyentes dedican un espacio de tiempo para rezar, casi siempre desde el 16 de diciembre al 24 de diciembre.

Como es lógico, este novenario se prolonga por nueve días antes del nacimiento del nuevo mesías. Agrupa un conjunto de oraciones que los feligreses repiten como alabanzas a Dios y para recibir a Jesús.

Novenario navideño: Su historia

La Novena de Aguinaldos se realiza en algunos países suramericanos desde el siglo XVIII, época colonial que dejó una huella en el ámbito religioso: el cristianismo procedente de Europa. El rezo dura nueve días, mientras tanto los creyentes realizan una vigilia para la reflexión y la espiritualidad antes de la llegada del hijo de Dios.

Novena de aguinaldos

Corresponde una oración diaria diferente, que se acompaña con plegarias a la Virgen María, San José y el Niño Jesús. Los devotos se unen diariamente en una oración de fe con este orden:

El cierre de la novena es el 24 de diciembre, día relevante para dar la bienvenida al niño Jesús, para luego sentarse en la mesa y compartir la cena navideña. Algunas familias realizan un intercambio de regalos y otras aprovechan para charlar o contar anécdotas.

La novena se realiza, principalmente, para orar y efectuar peticiones de prosperidad, paz, amor, salud y milagros.

Nueve días de encuentro entre amigos y familiares

El novenario decembrino es una tradición histórica que incluye a vecinos, amigos y familiares para conmemorar las nueve etapas del recorrido que realizaron José y María desde Nazaret hasta Belén.

Novena de aguinaldos

El propulsor de esta novena fue el monje ecuatoriano Fray Fernando de Jesús Larrea, posteriormente la Madre María Ignacia modificó las frases para que los más pequeños pudieran participar y acompañar la novena con oraciones sencillas.

La primera oración navideña de la novena de aguinaldos para rezar en familia todos los días puede ser:

Benignísimo Dios de infinita caridad,
que tanto amasteis a los hombres,
que les diste a tu hijo la prenda de tu amor,
para que hecho hombre en las entrañas de una Virgen
naciese en un pesebre para nuestra salud y remedio;
yo, en nombre de todas las personas,
doy infinitas gracias por este soberano beneficio.

En retorno de él te ofrezco la pobreza, humildad
y demás virtudes de tu hijo humanado,
suplicando por sus divinos méritos, por las dificultades en su nacimiento
y por las tiernas lágrimas que derramó en el pesebre,
que dispongas nuestros corazones con humildad profunda,
con amor encendido, con tal desprecio de todo lo terreno,
para que Jesús recién nacido tenga en ellos su cuna y more eternamente.
AMÉN

(Se reza tres veces el Gloria)

Recuerda que estas celebraciones deben siempre ir de la mano con la reflexión, la fe y el altruismo. El novenario forma parte de ese legado religioso de nuestros antepasados y una muestra de nuestra fascinante cultura a los ojos del mundo. Estas son nuestras redes sociales para que dejes tu opinión sobre esta conmemoración.

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Malbin Rodríguez