La Semana Santa en Tunja, ciudad colonial ubicada en el corazón de Boyacá, Colombia, es una experiencia que va más allá de lo religioso. Declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Nación, esta celebración ancestral se convierte en un viaje de fe, tradición y arte que cautiva a propios y extraños.
Su historia se remonta al siglo XVII, cuando el sacerdote español Juan de Castellanos, insigne poeta y figura clave en la historia de la ciudad, instauró las procesiones como un acto de fe y devoción. Este clérigo, también artífice de la construcción de la Catedral Basílica Metropolitana Santiago de Tunja, dejó un legado imborrable en la cultura tunjana.
Las procesiones, que se llevan a cabo durante toda la semana, son el corazón de la celebración. Cada una de ellas tiene un significado especial y está marcada por la solemnidad, el fervor religioso y la belleza de las imágenes que recorren las calles empedradas de la ciudad.
Un recorrido por la fe en Tunja
El Domingo de Ramos, la procesión de Jesús Nazareno, da inicio a la Semana Santa. La imagen, cargada por los nazarenos, recorre las calles en un ambiente de recogimiento y fervor. El Miércoles Santo, la procesión del Santo Ecce Homo conmemora la presentación de Jesús ante Pilatos.
El Jueves Santo, la solemnidad se intensifica con la procesión del Santo Sepulcro. El Viernes Santo, la ciudad se viste de luto para la procesión del Santo Entierro, una de las más concurridas y emotivas. El Domingo de Resurrección, la alegría se desborda con la procesión del Santo Resucitado, que marca el final de la Semana Santa.
Más allá de las procesiones
La Semana Santa en Tunja también es un tiempo de reflexión, oración y recogimiento. Las diferentes iglesias de la ciudad ofrecen misas y eventos especiales para conmemorar la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
Un legado cultural invaluable
La Semana Santa en Tunja es una expresión viva de la fe y la cultura del pueblo colombiano. Es un legado que se transmite de generación en generación, y que se ha convertido en un símbolo de identidad para la ciudad.
Recomendaciones para vivir la Semana Santa en Tunja:
- Asistir a las diferentes procesiones y eventos religiosos.
- Visitar las iglesias de la ciudad y admirar su arquitectura colonial.
- Probar la gastronomía típica de la región, como el tamal boyacense y el masato.
- Disfrutar de la música sacra y los cantos tradicionales.
- Alojarse en un hotel o posada colonial para vivir la experiencia al máximo.
La Semana Santa en Tunja es una invitación a un viaje de fe, tradición y cultura. Una experiencia única que te permitirá conectar con la esencia del pueblo colombiano.
X: @Co_ilustres
Facebook: Colombianos Ilustres
Instagram: @co_ilustres
LinkedIn: Colombianos Ilustres
