Gloria Valencia de Castaño, más que una simple presentadora, fue una encantadora figura que sedujo a los colombianos con su voz melodiosa y elegancia natural.
Conocida como la “Primera Dama” de la televisión, abrió las puertas a un mundo de conocimiento y cultura, dejando una huella imborrable en el corazón de varias generaciones.
Una pionera que iluminó la pantalla con su calidez
Nacida en Ibagué el 27 de julio de 1927, su pasión por la comunicación la llevó a encender las pantallas desde 1954, contagiando a los televidentes con su entusiasmo en programas inolvidables como “Conozca a los autores”, donde dialogaba con grandes figuras como León de Greiff.
Su espíritu inquieto la llevó a explorar diversos formatos, conquistando al público con programas comerciales, culturales y educativos. Su sonrisa radiante y su profesionalismo impecable la convirtieron en un faro para los comunicadores y televidentes.
Gloria no solo informaba, también inspiraba. Programas como “El precio es Correcto”, “Estudio Uno” y “Cumpleaños Ramo” llenaron los hogares colombianos de alegría y entretenimiento. Su carisma era contagioso y su elegancia encandilaba.
Su compromiso con la cultura la llevó a crear programas memorables como “Carta de Colombia”, galardonado con el Premio Ondas, y “Naturalia”, donde su famosa frase “Lástima que la televisión no sea a color” encendió la imaginación del público.
Gloria Valencia de Castaño fue más que una presentadora, fue una mujer visionaria que transformó la televisión colombiana. Su legado multifacético abarca la cultura, la sociedad y el medio ambiente, dejando una huella imborrable en la historia del país.
Su partida el 24 de marzo de 2011 dejó un vacío en la pantalla, pero su luz sigue brillando en la memoria de quienes la conocieron y admiraron. Su nombre está grabado en la historia de la televisión colombiana, y su talento y pasión siguen inspirando a las nuevas generaciones.
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